Un proyecto expositivo de Isabel Wagemann
El proyecto Conquistadoras busca trastocar las costuras del sentido del término "conquistador", centrándose en las experiencias de mujeres latinoamericanas que hicieron el viaje en sentido inverso: la conquista de España desde Latinoamérica.
A las conquistadoras las une el origen –un continente común–, la tierra que las acogió y la necesidad de hacer del arte –fotografía, literatura, música, baile, teatro, plástica– su forma de vida. Todas comparten al menos un mismo viaje y el innegable descoloque que produce la extranjería. Todas han dejado en España una marca significativa en el ámbito cultural, artístico y social. A día de hoy, Conquistadoras reúne treinta y cuatro fotografías de una conquistadora más: Isabel Wagemann llegó desde Chile a Madrid en 1998. La fotógrafa se refiere a sus retratadas como mujeres salmón, metáfora de una de las migraciones más extremas del reino animal. 
“He querido mirar a los ojos de otras mujeres, migrantes como yo y diferentes a mí, pero todas, al fin y al cabo, mujeres salmón. Porque las conquistadoras somos valientes por naturaleza, nadamos contra la corriente para alcanzar una nueva orilla y dejamos atrás tierra, seres queridos, costumbres, infancia. No nos queda otra. Pero lo hacemos con ganas, garras, ambición, amor y un montón de dudas. Las mujeres salmón nos movemos desde lo femenino, en un viaje arriesgado y generoso que dibuja una línea vital que «se parece más a una ola que a una flecha».  
Como parte del proyecto, me gusta trasladar a las salas de exposición un trocito de mi hogar en Madrid. Construir un espacio de reflexión, donde los visitantes puedan mirarse en mi espejo, sentarse bajo la luz de mi lámpara de lectura y pensar en estas conquistadoras y a través de ellas, en el inmenso y difícil viaje que supone la migración para las mujeres”.
La exposición redefine así el significado tradicional de la palabra "conquistador", para destacar los logros y la trayectoria de estas mujeres, en lugar de su asociación histórica con la violencia y la conquista territorial masculinas. Se enfatiza el aspecto femenino de la migración y la lucha por establecer un nuevo hogar y una identidad en un país extranjero. 
Los objetos que completan la muestra –reunidos en la maleta del camino y la memoria–, forman una colección personal, significativa, preciada y preciosa. Son los objetos que han acompañado a las conquistadoras en sus viajes. Representan un puente con su pasado, que les permite volver cuando más lo necesitan, a su tierra materna. Pretenden también ayudar al visitante a comprender la potente experiencia migratoria de estas viajeras latinoamericanas que, un día, buscaron su casa en España. 
Las conquistadoras son guerreras. No tienen flechas, pero sí la fuerza que se necesita para reconvertir el pasado y poner luz y humanidad en el presente. Lo dicen los rostros de estas treinta y cuatro mujeres, retratadas desde una misma mirada: la de la admiración y el asombro de una fotógrafa frente a la experiencia de otras mujeres salmón.​​​​​​​
“Los salmones avanzan por tus venas rompiendo en tu locura”.
                                                                                                      Carla S. Wagemann